Venezuela tiene una alta dependencia de las importaciones para abastecer el mercado de repuestos para vehículos, lo que genera problemas de calidad, garantía y costo. Así lo denunció el presidente de la Cámara Nacional de Talleres Mecánicos (Canatame), Gino Fileri, quien reveló que alrededor del 98 % de los repuestos que se usan en el país son importados.
Fileri explicó que muchos de los repuestos que llegan al país no son de calidad, no son reconocidos por nadie y no hay ninguna planta que los certifique. Esto afecta al consumidor final, que puede sufrir daños en su vehículo o accidentes por el mal funcionamiento de las piezas.
Por ello, Fileri solicitó a las autoridades venezolanas que se establezca un mecanismo de certificación para los repuestos que entran por puerto, y que se exija a los importadores que traigan un certificado, den garantía y se hagan responsables en caso de algún problema.
Además, Fileri señaló que el sector de talleres mecánicos enfrenta otros tres problemas: la informalidad, la ecología y contaminación, y la inspección vehicular. Dijo que es necesario regularizar la actividad de los talleres informales, controlar las emisiones contaminantes de los vehículos y aplicar una inspección técnica periódica para prevenir los accidentes registrados a nivel nacional.