martes 05, diciembre 2023

#ESPECIAL El gobierno venezolano es incondicional en sus relaciones con países terroristas #7Jul

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La preocupación por el acercamiento de Venezuela con países que apoyan el terrorismo y violación de los Derechos Humanos, expresada tanto por el Congreso como el gobierno de los Estados Unidos, es compartida también por otras naciones, particularmente de Europa. 

Esa es la apreciación que tiene el doctor Nelson Valera, quien tuvo una larga carrera diplomática que desarrolló en Austria, Bulgaria, China, Francia, Grecia, Hungría, Suecia y la hoy desaparecida Unión Soviética. 

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Dice que es preocupante cuando se le refiere que, desde varios años, Venezuela esté siendo señalada de tener vinculación con grupos terroristas –además de las guerrillas colombianas– como la tristemente famosa Hezbolá. 

Al respecto la figura del gobierno venezolano sobre la cual ha recaido más sospechas ha sido el hoy exministro Tareck El Aissami, defendido de las acusaciones del Congreso y gobierno de los Estados Unidos tanto por el desaparecido Hugo Chávez como por Nicolás Maduro y Delcy Rodríguez. Incluso, en el avión Boeing 747 de carga, perteneciente a Emtrasur, que aterrizó en Argentina y no fue devuelto a Venezuela iban 5 iranies, uno de los cuales fue identificado como terrorista. 

No se puede traer al territorio venezolano problemas de otros países involucrados en el terrorismo, asienta. La historia de Venezuela ha sido bastante buena y no se puede enlodar con ese tipo de actividades nefastas. Porque más allá de la amistad y la cooperación con los pueblos no se puede adoptar una relación incondicional, como está ocurriendo con Venezuela,  con países y  grupos que tienen una cultura diametralmente opuesta a la nuestra. 

Es inaceptable decir: “yo tengo relaciones de ese tipo, porque desde el punto de vista político e ideológico, eso es lo que debe ser.”  Esa es una equivocación muy grande porque estamos apartándonos de una verdadera relación de amistad de pueblos, para solidarizarnos con  otros caracterizados por  violencia,  terror,  muerte. 

Ha llamado la atención lo que ha venido ocurriendo en Francia, donde se ha propagado el asombro, el estupor y la condena contra los individuos musulmanes que han decapitado a un profesor porque no les gustaba la forma como educaba y, además, han atacado una iglesia, entre los casos más recientes. 

Estos sucesos tienen implicaciones muy graves porque fundamentalmente está en la formación de los niños y jóvenes, que han sido adoctrinados en la violencia, la cual tiene su mayor expresión en quitarle la vida a quienes no piensan igual que ellos. Apoyar regímenes y grupos de ese tipo no es razonable porque nosotros tenemos una formación distinta y, por tanto, propugnamos la defensa de la vida y condenamos la violación a los Derechos Humanos. 

Es por ello, adiciona, que estamos en desacuerdo con el apoyo dado por el gobierno venezolano a Rusia en su invasión a Ucrania, aunque haya sido de palabras. 

Lo que ha venido ocurriendo en Ucrania son resabios de Rusia. Se trata de la idea de un gobierno llegó  a ser un imperio, pero al desmoronarse la Unión Soviética, nuevamente, quiere volver a ser lo que fue antes. La solidaridad, aunque sea en palabras, va a redundar en la fase ideológica política, pero es negativa. 

Por otra parte, este gobierno, a partir del mandato de Hugo Chávez, profundizó sus relaciones con Irán, cuyo gobierno llegó a ofrecer cooperación para la utilización de energía nuclear con fines pacíficos. 

Desde entonces se ha pretendido hacer ver que Venezuela es líder de toda la América, pero todos sabemos donde estamos parados. 

Nuestro país tenía un gran potencial humano, pero en gran parte se ha ido y tenemos la esperanza de que puedan volver para la reconstrucción cuando llegue el momento de hacerlo porque tenemos posibilidades. Nosotros tenemos que resolver nuestros problemas, tenemos que hacerlo nosotros mismos. 

Y volviendo al punto de relaciones entre gobiernos, sus resultados han sido negativos para nuestro país porque ha primado lo ideológico y político. 

Dentro de las relaciones con esos países, el gobierno de Venezuela va a apoyar cualquier cosa, aunque sea de palabras o mentirijillas. Seguirá pregonando su tipo de hacer lo que ha hecho. 

Como en Europa, hay muchos países en América Latina donde los partidos que se identifican como de izquierda promueven un socialismo. Está el socialismo chileno, por ejemplo. Y vemos que el Partido Socialista Obrero español no tiene nada que ver con el Partido Socialista Unido de Venezuela. Son posturas que se le dan a una idea, a un foco de tipo político ideológico, para luego expresarlo como una especie de paraguas  a nivel nacional. Los venezolanos sabemos lo que queremos. 

Y concluye sus declaraciones  comentando que ya estamos indigestados con tantos ismos, como socialismo, populismo,  comunitarismo y  totalitarismo

Antonio Paz

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