La opacidad marca la pauta del Estado cuando de accidentes aéreos militares se trata. Sólo 20% de los siniestros es informado oficialmente por las FAN, según informes independientes
Desde que Venezuela y Rusia tienen negocios en materia armamentística ha surgido un historial de accidentes de helicópteros y aviones caza que llama la atención. El más reciente fue la caída del avión caza de fabricación rusa el pasado 2 de julio de 2023, cuando la Aviación Militar de Venezuela hacía entrenamientos para el desfile militar del 5 de Julio por la declaración de la Independencia y el día de la Fuerza Armada Nacional.
Según fuentes oficiales, el accidente del avión militar Sukhoi 30 MK2 fue ocasionado por el impacto de un “zamuro” en el sistema de motores. En el siniestro, que se registró cerca del municipio Guaicaipuro (Miranda), perdió la vida uno de sus dos pilotos pese a que se catapultó de la aeronave, informó el Ministerio de Defensa.
“Ambos tripulantes lograron eyectarse, sin embargo, lamentablemente el coronel Paulino José Millán Sabino falleció al caer a tierra”, dijo un comunicado oficial del Ministerio de Defensa.
El historial de accidentes aéreos en los últimos 20 años
Según el último informe realizado por la Asociación Civil Control Ciudadano en 2022, en las últimas dos décadas han ocurrido 83 accidentes con aeronaves militares de la Fuerza Armada Nacional y han fallecido 169 personas.
No obstante, en los últimos ocho años han ocurrido al menos ocho accidentes con aeronaves rusas al servicio de la Fuerza Aérea de Venezuela, según la presidenta de Control Ciudadano, Rocío San Miguel.
San Miguel comentó que al menos siete helicópteros de fabricación rusa se han siniestrado en Venezuela. Se trata de los helicópteros Mi-17-V5 de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), que se adquirieron entre 2005 y 2006. De ellos, seis pertenecían al Ejército y uno a la Guardia Nacional Bolivariana, según la especialista en temas militares en Venezuela.
Con el fallecimiento del coronel Paulino José Millán Sabino el pasado mes de julio, las muertes en accidentes de aeronaves rusas en Venezuela ascienden a 47.
San Miguel puntualizó que este es el tercer accidente en los que intervienen aeronaves de tipo Sukhoi 30.
El primero ocurrió en Apure en el año 2015 (AMBV 0406), el segundo en 2019 en Guárico (AMBV 0457) y el último el 2 de julio de 2023 (AMBV 3363).
La opacidad es la bandera del Estado en temas militares
Como en muchos temas relacionados con el Gobierno venezolano, la opacidad juega un papel preponderante. No hay informes o declaraciones que detallen el porqué de estos accidentes. Al respecto Rocío San Miguel señaló que “los venezolanos tenemos derecho a conocer los resultados de la investigación, mientras tanto la operatividad de la FAN queda en entredicho”.
El informe Accidentes de aeronaves de la Fuerza Armada Nacional realizado por Control Ciudadano asegura que “la opacidad en el manejo de la información relativa a los aspectos que atañen a la Fuerza Armada Nacional, por parte del Estado, ha sido una constante en los últimos años. No existe rendición de cuentas, auditabilidad y transparencia en la planificación, ejecución y evaluación de la política del Estado en materia de seguridad y defensa nacional y los accidentes con aeronaves militares no escapan a este patrón”.
El informe también señala que las funciones de control democrático son inexistentes para reconocer públicamente las causas de los accidentes con aeronaves militares en Venezuela.
“Las juntas de vuelo en teoría rinden cuenta en los componentes, pero no trascienden sanciones, administrativas, civiles o penales que pudieran derivarse de los hechos y los correctivos. Tampoco se realizan investigaciones por parte del Ministerio Público en estos casos ni por parte de la Asamblea Nacional”, detalla el informe.
Control Ciudadano también denuncia en su informe que, entre junio de 2018 y noviembre de 2021, se registraron once accidentes de aeronaves de la Fan, pero solo en dos casos las autoridades militares emitieron comunicados informando sobre el siniestro. En los ocho accidentes restantes en esas estadísticas de la asociación civil dirigida por San Miguel, no hubo información oficial.
“La información pudo conocerse, a través de las redes sociales, por la prensa, periodistas independientes y testigos presenciales, algunos citando fuentes militares o acompañando la nota con fotos. De esos once accidentes, según pudo conocer Control Ciudadano, cinco aeronaves resultaron destruidas, una con daños severos, tres con daños menores y dos de las cuales, se desconoce totalmente su situación”, precisó Control Ciudadano.