En los últimos años, la presencia iraní en Venezuela ha generado un intenso debate a nivel internacional. Estas dos naciones, ubicadas en diferentes continentes, con diferentes costumbres, tradiciones y maneras de ver la vida, han establecido una relación estratégica que ha despertado la atención y, sobre todo, la preocupación, de diversos actores internacionales. ¿Cuáles son los aspectos clave de la presencia iraní en Venezuela y su impacto en la región?
La relación bilateral entre Irán y Venezuela se fortaleció de manera exponencial desde principios de la década de 2000, cuando ambos países se acercaron porque ambos tenían -y siguen teniendo- una visión
antiimperialista y una postura crítica hacia Estados Unidos. En otras palabras, los unió el odio. Y ahí empezamos mal. Porque una cosa es no estar de acuerdo. Otra, muy distinta, es moverse motivado por el odio. Durante el gobierno de Hugo Chávez en Venezuela, y a consecuencia de ese sentimiento, se establecieron vínculos políticos, comerciales y militares significativos entre ambas naciones. Estos lazos se han mantenido -e incluso han crecido- bajo el mandato de Nicolás Maduro.
La cooperación económica entre Irán y Venezuela se ha centrado principalmente en el intercambio de petróleo y productos derivados. Irán ha brindado apoyo técnico y financiero a la industria petrolera venezolana, por la grave crisis que hemos sufrido en los últimos años. Además, se han establecido empresas mixtas en diversos sectores, como la agricultura, la minería y la construcción. Esta cooperación económica beneficia a ambos países, especialmente dentro del contexto de sanciones internacionales.
Pero no es sólo la cooperación económica. Ojalá fuera solamente eso. También, y quizás más importante, está la cooperación militar. Y por supuesto, también ha sido objeto de controversia. Hay informaciones de inteligencia de occidente que denuncian la presencia de asesores militares iraníes en Venezuela, así como sobre la transferencia de tecnología y armamento. Esta colaboración ha generado preocupación en algunos países de la región quienes ven en ella una amenaza a la estabilidad y seguridad regional. Sorprende, sin embargo, la ingenuidad, por llamarla de alguna manera, con la que los Estados Unidos ha manejado esta relación justamente en su patio trasero…
¿Cuáles son las razones y las motivaciones detrás de la estrecha relación entre Irán y Venezuela? Como ya dije, ambos países comparten posturas antiimperialistas y buscan contrarrestar la influencia de Estados Unidos en la región y la cooperación económica y militar les permite sortear las sanciones internacionales impuestas sobre ellos. Pero más allá, para Irán es tener una presencia en América Latina, una plataforma para expandir su influencia y contrarrestar la presión internacional.
Para nadie es secreto ni sorpresa que esta presencia iraní en Venezuela tiene implicaciones regionales y globales. A nivel regional, porque genera preocupación en algunos países vecinos que ven esta colaboración como una amenaza a su seguridad y estabilidad. No es secreto que podría promover la proliferación de armas y el fortalecimiento de grupos armados no estatales. A nivel global, porque la relación Irán-Venezuela desafía la política exterior de Estados Unidos y sus aliados, generando tensiones y aumentando la rivalidad geopolítica. Ya bastante preocupación ha causado la presencia de otros grupos islámicos en Venezuela, especialmente el reconocido grupo libanés Hezbollah. Irán (y también Siria) son bastantes cercanos a Hezbollah. Este grupo recibe armas, capacitación y apoyo financiero de Irán y ha contado con la bendición del presidente Bashar al-Ásad de Siria. Esta situación plantea interrogantes sobre las implicaciones políticas, de seguridad y geopolíticas que esto podría tener, no solo para Venezuela, sino para la región en su conjunto.
La atención internacional está enfocada en la presencia iraní en Venezuela como un fenómeno complejo que ha generado controversias y preocupaciones en la región y más allá. Mientras algunos gobiernos de izquierda ven en esta relación un acercamiento estratégico, otros la perciben como una amenaza a la estabilidad regional. El futuro de esta colaboración dependerá de diversos factores geopolíticos y de cómo evolucione la situación interna en ambos países. Existen informes y testimonios que sugieren que miembros de Hezbollah han utilizado a Venezuela como un lugar para actividades de financiamiento, reclutamiento y entrenamiento. Se ha especulado que el grupo podría estar involucrado en el tráfico de drogas, contrabando de armas y lavado de dinero. Venezuela podría terminar, entonces, siendo la plataforma más importante en América para actividades ilícitas y terroristas, sobre todo por su ubicación geográfica y el apoyo del régimen de Nicolás Maduro. Que Dios nos agarre confesados…