Los subsidios del gobierno se reducen por la crisis económica y los ciudadanos pagan más por electricidad y agua sin garantía de calidad.
Los venezolanos enfrentan desde principios de año un fuerte incremento en las facturas de servicios públicos como agua, electricidad, gas y teléfono. Esto se debe a la disminución de los subsidios del gobierno, que atraviesa una grave crisis financiera por el desplome de los ingresos petroleros.
Según la agencia Reuters, muchos venezolanos pagan gran parte de sus salarios por servicios que no funcionan adecuadamente.
La ciudad de Valencia, en el estado de Carabobo, sufre cortes de energía frecuentes, según María Rodríguez, una logopeda de 36 años que paga el doble por sus servicios que el año pasado.
La inflación de los servicios básicos -que incluyen electricidad, agua y recolección de basura- aumentó 325,4% en los 12 meses hasta marzo, según datos del Banco Central de Venezuela. Los precios de los servicios de telecomunicaciones e Internet subieron 1.003% en el mismo período.
Los subsidios a los servicios públicos se mantuvieron congelados durante años gracias a los ingresos del petróleo, pero en los últimos años han disminuido progresivamente. Los venezolanos ahora deben pagar más por servicios que son deficientes y que afectan su calidad de vida.
